Tanto si es un cachorro como un perro adulto tu mascota debe acostumbrarse a dormir en su cama. Puede que él no lo haga por su cuenta por lo que deberás enseñárselo tú.
Esto te servirá para las noches en las que se meta a dormir en tu habitación o cuando se suba a tu propia cama. Si aprende este truco te será más fácil quitarle esa manía y que pase las noches tranquilamente en su cama.
Tabla de contenidos
1. Elige la cama correcta
La mejor cama para tu perro no es la más bonita, sino la que más cómoda le parezca a él. Es importante que aciertes con el tipo de cama, ya que descansará sobre ella durante muchas horas al día.
1.1. Tamaño
El tamaño de la cama debe ser mayor que el tamaño del perro en su edad adulta. Tiene que poder estirarse y moverse un poco sin salirse de ella.
También es importante el grosor. No escojas una cama muy fina, ya que acabará pasando frío en las noches de invierno.
1.2. Forma
Hay básicamente dos tipos de cama:
- Rectangulares: ideal para perros que se estiran al dormir.
- Ovaladas: para perros que duermen hechos una bola.
Observa cómo duerme tu perro para elegir la cama que mejor se le adapte.
2. Enseñarle a usar la cama
Sigue estos pasos para enseñar a tu perro a tumbarse en su cama. El número de sesiones que necesites variará en función de cada perro.
Para afianzarlo mejor enséñale el truco en diferentes lugares. No lo hagas siembre en la misma habitación.
2.1. Primer paso: ve a la cama
Para el comienzo del entrenamiento solo tienes que preocuparte de que vaya a la cama. Si en un primer momento no le hace caso puedes dejar alguna golosina sobre la cama para que la asocie como algo positivo.
Para que te obedezca debes sujetar una golosina con la mano y mientras la huele guiarle hasta que esté sobre su cama. Repite este proceso con la orden “cama” o “a dormir” para que lo asocie.
Cuando te haga caso y siga la golosina hasta su cama cambia de mano. Con una le guías hasta el colchón y cuando esté sobre él le das el premio con la otra mano.
2.2. Segundo paso: tumbarse en la cama
Lo siguiente será conseguir que se tumbe. Para conseguirlo deberás añadir la orden de que se tumbe una vez esté sobre la cama. El premio deberás dárselo al tumbarse.
Repite el proceso varias veces y después deja de darle la orden de tumbarse y espera. Él tenderá a tumbarse, que es lo que ha hecho las últimas veces, y en cuanto lo haga dale el premio.
Con esto conseguirás que vaya a su cama y se tumbe al llegar.
2.3. Tercer paso: aumentar la distancia y el tiempo
A medida que vaya interiorizando la orden podrás aumentar la dificultad. Para ello haz progresivamente los siguientes cambios:
- Aumenta la distancia de la cama: poco a poco ve alejándola para que tenga que desplazarse él solo en lugar de seguir el premio.
- Aumenta el tiempo hasta el premio: el objetivo final es que vaya a su cama y se relaje, por lo que es esencial que aumentes progresivamente el tiempo hasta que le das el premio.
2.4. Cuarto paso: ir reduciendo los premios
Establece una rutina y practica este truco a diario. Deberás tener constancia y no conformarte con ensayarlo unos cuantos días.
A medida que se vaya relajando podrás ir reduciendo los premios. Es importante que llegue un momento en el que deje de recibir las golosinas, ya que en caso contrario esperará siempre la recompensa.
Tardará un tiempo, pero al final verás como con la orden tu perro irá a la cama y se relajará. Con entrenamiento positivo conseguirás que tu perro o tu cachorro vaya a dormir a su cama.